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Morderse las uñas, un hábito muy perjudicial para tus dientes

Ante momentos de estrés, aburrimiento, nerviosismo…muchas personas se muerden las uñas. Este mal hábito, que puede convertirse en una manía si no se puede controlar, además de afear el aspecto de tus uñas y tus manos, puede perjudicar también a tus dientes.

Desgaste dental o caries

La onicofagia, el término científico que recibe el hábito de comerse las uñas, puede ser muy perjudicial para tu salud dental a medio y largo plazo. Una de las consecuencias más habituales es el desgaste dental. Cuando una persona se muerde las uñas de manera crónica está continuamente haciendo chocar bruscamente los dientes. Esto, que puede parecer poco importante, provoca que, a corto plazo, el diente se desgaste (por que se desprenden prismas de esmalte y se provocan microfracturas) y, debido a ello, se debilite.

Además del desgaste, es frecuente que aumenten las caries. Las manos son un foco de bacterias. Cuando una persona se muerde las uñas hay un mayor riesgo de que esas bacterias lleguen a la boca y puedan provocar caries. Un estudio publicado por la revista especializada ‘Contemporary Clinical Dentistry’ estudió la influencia de morderse las uñas con una mayor presencia de microorganismos, en concreto de enterobacterias, en la cavidad oral. Tras su estudio, los científicos hallaron un índice de placa superior y, además, la presencia de bacterias de este tipo.

Trastornos en la articulación temporomandibular

Otra de las consecuencias de morderse las uñas es que se produzcan trastornos en la articulación temporomandibular, ATM. Estos afectan a los huesos y músculos que unen el cráneo con la mandíbula inferior. Estos pueden provocar dificultades para morder, dolor de oído, de cabeza, dolores en la mandíbula e incluso dificultad para abrir y cerrar la boca.

Morderse las uñas es un hábito muy perjudicial para tus dientes
Morderse las uñas es un hábito muy perjudicial para tus dientes (Flickr | photobythomas – CC BY 2.0).

Un artículo publicado por la revista especializada ‘Journal of Clinical and Diagnostic Research’ relacionó directamente los malos hábitos orales, entre los que se encuentra morderse las uñas, con los síntomas de los trastornos ATM. Los científicos revisaron las salud oral de 240 adolescentes. Casi la mitad de ellos, un 48%, presentaba tres diferentes tipos de dolores en los dientes, siendo los síntomas frecuentes del trastorno ATM (dolor de cabeza, cuello y dientes) los más señalados. Además en el grupo estudiado, el hábito de morderse las uñas era el más frecuente junto con morderse los labios o cualquier objeto, lo que mostró a los científicos que existía una asociación significativa entre morderse las uñas y la presencia de trastornos en la articulación temporomandibular.

Dejar de morderse las uñas es posible

El hábito de morderse las uñas se produce habitualmente debido a la ansiedad o el nerviosismo. Cuando este se cronifica, deja de ser un mal hábito para convertirse en una manía que, en muchos casos, se lleva a cabo por simple aburrimiento y casi de manera automática. Existen diversos métodos para dejar de morderse las uñas.

En las farmacias venden esmaltes especiales que hacen que al morderte notes un sabor desagradable. Esto te ayudará a evitar seguir mordiéndote. Otra opción es intentar distraerte con otra cosa, por ejemplo comer chicle o un caramelo. Además, no olvides acudir a tu dentista para que compruebe los daños que ha ocasionado este hábito en tu boca y, lo que es más importante, poder solucionarlos.