El embarazo es una etapa de muchos cambios para las mujeres, y debido a ello la salud oral es uno de los aspectos que más se resiente durante este periodo. Dado el cambio hormonal que sufre el cuerpo la composición de la saliva cambia generando un ph más ácido, lo que provoca que los dientes estén menos protegidos y aparezcan caries. Pero el problema bucal más común durante la gestación es la gingivitis. Un estudio reciente de la Universidad de Alabama en Birmingham demostró que las embarazadas son más susceptibles a padecer esta patología y que, además de las complicaciones que puede suponer para la madre, también se asocia con un mayor riesgo para el bebé de sufrir preeclampsia o parto prematuro.
El dentista por tanto se debe convertir en uno más del equipo médico que vigila a la embarazada durante los meses de gestación para que los problemas bucales se mantengan a raya. Ni que decir cabe que extremar la higiene oral durante este periodo es importantísimo para minimizar los riesgos, pero ahora han elaborado un medicamento que puede convertirse en el complemento ideal para esto. Un grupo de investigadores del Hospital Universitario de Würzenburg (Alemania) han elaborado una pastilla que contiene Lactobacillus-reuteri, un elemento que se produce de forma natural en el organismo pero que no todas las personas lo tienen. Combate a los organismos nocivos tales como la bacteria Streptococcus Mutans, una de las responsables de las caries, segregando reuterina, que provoca efectos antimicrobianos que no dañan los dientes.
El estudio se llevó a cabo en 45 mujeres embarazadas que padecían gingivitis al comienzo del tercer trimestre. El tratamiento consistía en consumir el suministro de pastillas estipulado dos veces al día hasta que se produjera el parto, y los resultados fueron altamente satisfactorios. Las embarazadas que recibieron las dosis de L-reuteri tuvieron una disminución significativa de la placa y de los índices gingivales que las mujeres del grupo de control a las que se suministró un placebo. Por ello estas pastillas podrían convertirse en un futuro no muy lejano en una herramienta más de prevención de la gingivitis durante el embarazo.