El aspecto de la dentadura ha cobrado mucha importancia en los últimos años como parte fundamental de una estética cuidada. Es muy común ver a numerosas ‘celebs’ de todos los ámbitos lucir unas sonrisas estupendas gracias a tratamientos de ortodoncia como Invisalign, que logra alinear la dentadura de una forma discreta y muy eficaz. También se ha convertido en tendencia el presumir de dientes blancos gracias a los blanqueamientos dentales, que si se realizan con moderación y bajo la supervisión de un profesional son beneficiosos.
Estos factores ayudan a tener unas facciones y sonrisa agradables, pero ¿la forma de los dientes influye en el atractivo? Esta misma pregunta se la hizo un grupo de investigadores de Reino Unido y han llevado a cabo un estudio sobre cómo influye la forma de los incisivos superiores en el atractivo de una mujer. Para ello se utilizó una fotografía de una sonrisa femenina manipulada de cinco formas diferentes: cuadrada, ovoide, triangular, cónica ovoide y cuadrada estrecha. Esta imagen se proporcionó a 30 odontólogos, 30 técnicos y 30 pacientes para que evaluaran que rasgos les parecían más atractivos.
Los resultados mostraron que la forma cónica-ovoide era la favorita en general (50%), favorita entre un 70% de los dentistas, el 50% de los técnicos y un 30% entre los pacientes. La medalla de plata fue para la forma ovoide, que quedó como segunda opción favorita entre los encuestados mientras que los datos arrojaron que la opción menos atractiva en general es la forma cuadrada. Los investigadores no obstante sostienen que no existe una única “forma ideal” de los incisivos superiores, y que deben ser los odontólogos quienes determinen cuál es la mejor opción según las necesidades de cada paciente.
Otras tendencias de estética dental
Existen otras modas de estética bucal que se han implantado que pueden causar verdaderos desastres en la salud oral. Los grillzs, los diastemas o los piercings bucales son algunas de estas tendencias que aunque parecen formas de adornar o complementar inofensivas, lo cierto es que son más perjudiciales de lo que se cree. La obsesión por los dientes de color blanco nuclear también se ha convertido en tendencia, y ha llevado a que mucha gente se someta a numerosos tratamientos blanqueadores (blancorexia) que de tanto abuso, acaban por dañar los dientes.
