Cada vez son más los estudios que vinculan la periodontitis no solo con un empeoramiento de la salud oral, sino con otras enfermedades importantes como el alzhéimer, ciertos tipos de cáncer e incluso con las enfermedades cardiovasculares. Ahora, un nuevo estudio realizado por investigadores de la Universidad Johns Hopkins ha relacionado a una bacteria común del mirobioma oral, la Aggregatibacter actinomycetemcomitans, que ocasiona periodontitis, con la artritis reumatoide (AR).
La AR se trata de una enfermedad inflamatoria sistémica autoinmune que se caracteriza por la inflamación continuada de las articulaciones y que paulatinamente va ocasionando su destrucción. Desde comienzos del siglo pasado los expertos han observado cierta asociación entre la enfermedad periodontal y la artritis, y creen que ambas tienen un factor común. Recordamos que la periodontitis también consiste en la inflamación e infección de los tejidos, en este caso de los que sostienen los dientes (encías, hueso alveolar y ligamento periodontal) y a lo largo del tiempo, si no se trata adecuadamente, se destruyen y ocasionan la pérdida del diente.
En este último estudio los investigadores han analizado muestras periodontales en las que observaron hipercitrulinación de las proteínas, un proceso similar que se había observado en las articulaciones de los pacientes que padecían AR. La citrulinación es una forma natural de regulación de las funciones de las proteínas, pero en los pacientes de AR se vuelve hiperactiva. Esto provoca que se formen anticuerpos contra estas proteínas generando inflamación y atacando a los tejidos, lo que se traduce definitivamente en la AR.
Observaron que de las diferentes bacterias asociadas a la enfermedad periodontal, la A. Actinomycetemcomitans era el único patógeno capaz de inducir la hipercitrulinación en los neutrófilos, que son las células más abundantes en las encías y en las articulaciones de los pacientes con periodontitis y artritis. En el estudio los sujetos con periodontitis y con AR tenían como nexo común la infección por A. Actinomycetemcomitans. Según los expertos, “podría ser la investigación más cercana a encontrar la raíz de la AR”.