El tratamiento que se utiliza para la cura de la periodontitis puede jugar un papel importante en la reducción de la inflamación y las toxinas en sangre. Además sería capaz de mejorar la función cognitiva en personas con cirrosis hepática. Las posibilidades han sido publicadas por investigadores de la Universidad Virginia Commonwealth.
Los investigadores han apuntado la cirrosis como una creciente epidemia, especialmente en algunas zonas de Estados Unidos. La cirrosis significa la presencia de tejido cicatricial en el hígado. En casos severos puede generar insuficiencia hepática. Entre sus principales complicaciones infecciones en todo el cuerpo y encefalopatía hepática. La periodontitis o enfermedad de las encías por su lado puede combatirse por medio de tratamientos como invisalign.
Cirrosis y Periodontitis
Para su estudio se expusieron dos grupos de voluntarios con cirrosis y periodontitis leve-moderada. Por un lado, el primer Un grupo recibió atención periodontal, incluida la limpieza de los dientes y la eliminación de toxinas bacterianas de los dientes y las encías. Por otro, el segundo grupo no se trató por enfermedad de las encías. Analizaron muestras de sangre, saliva y heces antes y 30 días después del tratamiento. También se realizaron pruebas estandarizadas para medir la función cognitiva antes y después del tratamiento.
Tras el tiempo de tratamiento descubrieron que el primer grupo obtuvo altos niveles de bacterias intestinales beneficiosas que podrían reducir la inflamación. Así como niveles más bajos de bacterias productoras de endotoxina en relación con el segundo grupo. Dicho grupo no tratado de periodontitis demostró un aumento en los niveles de endotoxinas en la sangre durante el mismo período de tiempo.
Dicha diferencia, según los mismos investigadores: «podría estar relacionada con una reducción en la inflamación oral que conduzca a una inflamación sistémica más baja o debido a que sean ingeridas y afecten a la microbiota intestinal«.
Finalmente la función cognitiva también mejoró en el grupo tratado. Esto sugiere que la reducción visible de la inflamación en el cuerpo, también puede minimizar algunos de los síntomas de la encefalopatía hepática. Matizando que esto se daría en personas que ya están recibiendo terapias estándar para la afección.