Los cigarrillos electrónicos y los vapeadores han ido ganando fama y aceptación en nuestra sociedad. Tanto es así que muchos de los fumadores de tabaco convencional se han pasado a esta moda, pero ¿es realmente tan buena como parece? ¿Es cierto que no manchan los dientes? ¿Producen periodontitis también? ¿Qué les diferencia del tabaco tradicional? ¿Son buenos estos vapers o vapeadores?
Como hemos mencionado la mayoría de los usuarios que consumen esto son antiguos fumadores que lo utilizan como alternativa, aunque parece que en el último año su popularidad ha crecido tanto que otros usuarios se suman a la moda.
La mayor parte del daño a nuestra salud que genera el tabaquismo es la combustión y la nicotina, es decir, el monóxido de carbono, el alquitrán y las más de 4.000 sustancias nocivas que lo componen. Por otro lado bien es cierto que estos vapeadores no estarían compuestos de todo esto, ya que el calor produce que los líquidos generen vapor sin combustión. Dichos líquidos pueden contener o no nicotina en función de las preferencias del usuario. Obviamente en caso de que esto fuese afirmativo el daño a nuestra salud oral sería mucho mayor.
Líquídos de vapeadores
¿De qué están formados estos líquidos de recarga? La Organización Mundial de Salud ha analizado más de 18 tipos diferentes de líquidos advirtiendo en todos niveles de nitrosaminas. Estos son los compuestos específicos del tabaco que son cancerígenos conocidos. En torno al vapor hemos de decir que el uso de e-cigarrillo expone a los tejidos orales a compuestos que resultan del calentamiento de la glicerina. Además del propilenglicol, de aromatizantes y la nicotina si contuviese.
Journal of Cellular Physiology ha publicado recientemente una investigación que apunta una alta tasa de muerte de células epiteliales. Estas son la primera barrera de defensa de nuestra cavidad oral. Daños que aumentan con su uso diario un 18% de tasa de muerte el primer día, un 40% el segundo, y un 53% el tercer día.